De las 2.350 especies de palmeras existentes en el mundo, una es endémica del archipiélago canario: la Phoenix Canariensis, llamada comúnmente “palmera canaria”
Sabías que La Gomera, es la isla del archipiélago canario que cuenta con mayor número de palmeras canarias por habitante, en concreto existen 5 palmeras de esta especie por cada habitante. Abunda sobre todo en las “medianías bajas”, entre 200 y 400 metros de altitud.
Esta especie, se piensa llegó a Canarias proveniente de África y su adaptación a las peculiaridades de esta tierra dio lugar a una especie propia del archipiélago.
Su tronco es muy grueso y alto pudiendo llegar a medir 35 metros, además es la palmera con mayor cantidad de hojas en su copa. En jardinería, es una de las 30 especies del mundo más utilizadas y es muy longeva: algunos ejemplares pueden vivir entre 2 y 3 siglos.
La palmera canaria, ha sido muy importante para la subsistencia de los habitantes de La Gomera, ya que éstos, han sabido aprovechar y dar buen uso a todas y cada una de sus partes.
Entre los usos más comunes de la palmera canaria destacamos:
- Las hojas o pencas, (formadas por el tallo central del que salen las hojas), ambas partes, tienen distintos usos: como alimento para el ganado, como materia prima en multitud de labores artesanales (empleitas -moldes para hacer queso-, patacones -embalaje para el pescado-, cestas, sombreros, escobas, esteras, mamparas etc). También se usan como combustible, como leña para tostar el gofio, fabricar la miel de Palma o cocinar. Las pencas más jóvenes o palmitos, se utilizan a menudo en celebraciones religiosas como en el Domingo de Ramos.
- El jarropón (conjunto de fibras leñosas que cubren el cogollo de la palma): ha sido utilizado como cama de ganado y como protección en el empaquetado de plátanos.
- Tronco: A partir de este se construyen pesebres para el ganado y colmenas, se utiliza en la construcción de techumbres y muros de contención, linderos....
- Raíces: Sus raíces se machacan para obtener unas fibras con la que se construyen sogas que se usan para fabrican las suelas de las alpargatas.
- Dátiles: Los dátiles de la palmera canaria se conocen en la gomera como “támaras o támbaras”, son alargadas y anaranjadas y mucho más pequeños que los dátiles de la palmera datilera. Tienen mucho hueso y muy poca carne. Fueron y son utilizados como alimento de los animales, especialmente de los cochinos. Sin embargo, fueron comidos por los habitantes de la isla en épocas de escasez.
- La savia (guarapo): Es el recurso obtenido de la palma más valorado en la actualidad, y su obtención el exponente más genuino de la cultura de la palma. Es una práctica muy antigua (más de 500 años) anterior a la conquista de Canarias, que se ha conservado en la isla y que conecta con las culturas del Norte de África. La cocción del guarapo, a través de un proceso artesanal, se obtiene “la miel de palma” que se ha convertido en los últimos años en un producto estrella de la gastronomía gomera.