La Gomera es una isla maravillosa y misteriosa, con multitud de leyendas y hechos insólitos de difícil explicación. Uno de estos hechos insólitos son las llamadas “luces errantes” o “luces populares” sucedidos  en diversos parajes de esta isla.

Una luz esférica que aparece súbitamente en la misma zona geográfica, de un color blanco azulado, naranja o verde y cuyo tamaño oscila entre el que tendría la llama de un cigarro puro encendido en la oscuridad y el de un balón de fútbol. En ocasiones, sobre estas luces se ha comentado que tienen un comportamiento aparentemente inteligente, acercándose al testigo o siguiéndole. La observación en algunos casos, va acompañada de un pequeño zumbido.

Las historias populares sobre las luces errantes son muy antiguas y en muchos casos nos remiten a leyendas que han sido contadas desde tiempos inmemoriales, donde a estas luminarias, se las identifica con fantasmas, almas en pena o con artimañas de brujería.

Una de estas leyendas, narra la aparición de una misteriosa luz, en el suroeste de La Gomera, en un lugar denominado Vega Abajo, entre Chipude y el caserío de la Dama. 

Se cuenta que hace muchísimos años tres piratas llegaron con un tesoro a la playa de la Rajita, (en la localidad de la Dama, Vallehermoso). Dos de ellos, subieron a Vega Abajo para enterrarlo y el otro se quedó en la playa con la embarcación. Una vez enterraron el tesoro, uno de los piratas mató al otro para ser menos a repartir. Cuando el superviviente llegó a la playa, le contó al que había quedado custodiando el bote, que su compañero se había perdido y que debían esperar un poco a ver si llegaba. Pero, el que había quedado en la playa, sospechando lo peor, se enfrascó en una gran pelea con el asesino, al que finalmente dio muerte. Luego, sin preocuparse por saber dónde estaba enterrado el tesoro, se perdió en la inmensidad del Océano Atlántico.

Desde entonces, según la tradición popular, una luz se aparece cada cierto tiempo en Vega Abajo, donde fue asesinado el primero de los piratas. Su alma en pena, vaga por estos parajes hasta que, según los ancianos del lugar, tres personas encuentren el tesoro y una de ellas muera en el lugar en el que aparezca digo tesoro.

Este fenómeno, que según los vecinos de la zona, fue visto por centenares de personas durante año, hace ya algún tiempo que no se deja ver, algunos achacan su desaparición a la construcción de la ermita de San Gregorio, pero, desde luego nadie sabe con seguridad si pudiera volver a aparecer en el futuro.

Si estás en La Gomera, puedes visitar los lugares que según la leyenda recorrieron los piratas: la playa de la Rajita, que es una playa virgen, aislada, de arena y callaos encajada al final de un barranco. El caserío de la Dama, ubicado sobre una lomada entre los barrancos de Erque e Iguala, un lugar destacado por sus días soleados y un clima cálido y suave que ha permitido el desarrollo de importantes cultivos de plataneras y frutas tropicales como el aguacate y el mango y por supuesto la Vega Abajo…donde ¡quizás tengas suerte y encuentres el tesoro!