La Gomera por la noche puede convertirse en el más romántico de los lugares. La luz de la luna, la visión de las estrellas, el ulular de las aves autóctonas y las vistas del océano y la montaña forman un pequeño paraíso al que nadie puede resistirse. Hotel Jardín Tecina te invita a disfrutar durante tu estancia en la isla de su CUEVA PARA DOS, un espacio natural acondicionado desde el que puedes contemplar el paisaje gomero en todo su esplendor.
Todos hemos querido escaparnos del mundo que nos rodea y perdernos en una alejada y preciosa isla sin preocupaciones que nos estorben. A veces, preferiríamos hacerlo en compañía de alguien, disfrutar a solas del sonido de las olas y la caricia de la brisa marina, pasear por sus senderos, contemplar los hermosos acantilados y descansar en sus playas de arenas negras. Por eso, La Gomera es el destino perfecto para vivir una escapada romántica.
La isla es una de las más pequeñas que componen las Islas Canarias, por lo que se convierte un lugar acogedor tanto para descansar como para realizar actividades en pareja a través de la naturaleza. ¿Has pensado en subirte a un barco, avistar delfines y visitar el Monumento Natural de Los Órganos, una joya de la naturaleza que se asemeja a un órgano de iglesia esculpido en roca? ¿Te apetece recorrer los bosques de laurisilva de Garajonay? ¿O probar la parchita, el fruto de la llamada planta de la pasión? La Gomera te ofrece multitud de actividades para que descubras todos sus espectaculares rincones acompañado de la persona que más amas.
Pero además, en Hotel Jardín Tecina te aseguramos una estancia placentera con una amplia variedad de servicios: desde hamacas, spa, piscinas, o masajes tailandeses. Todo llama a la relajación para que pases una estancia fantástica en un lugar único. ¿Y qué ocurre por la noche? Al caer el sol, puedes alojarte en una de las habitaciones de Hotel Jardín Tecina. Pero si estás con tu pareja y te apetece vivir una experiencia muy romántica, puedes almorzar o cenar en la Cueva para dos.
Esta cueva aclimatada asegura una velada de ensueño con vistas magníficas a la naturaleza de La Gomera. Una escapada romántica que se envuelve en una antigua leyenda. Según la historia, la cueva se encontró a principios del siglo XX, cuando los antepasados de la familia Olsen se toparon con las costas de La Gomera, entonces abruptas y casi desconocidas. A su llegada, arribaron al sur de la isla. Allí vivía una anciana en una cueva, que los acogió, les dio de comer y les dejó pasar la noche, acompañados por el rumor de las olas y la luz de las estrellas.
La historia llega a nuestros días, y los nuevos huéspedes de esta cueva, además de contar con una aclimatación idónea, pueden seguir disfrutando de unas privilegiadas vistas de la bóveda celeste, el océano y los bosques de la isla. En la cueva probarás las mayores delicias de La Gomera. La amplia variedad de menús incluye desde entrecot de ternera con salsa Bearnesa, o langostino y salmón ahumado, hasta ensalada de papaya con queso vegano, quesillo gomero con miel de palma o arroz meloso de verduras de temporada. De postre, nada mejor que un dulce de chocolate para poner la guinda a esta experiencia romántica. Por eso, prueba unas deliciosas trufas de chocolate y plátano y acompaña todos tus platos con los típicos vinos de Canarias.
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