Si sientes pasión por caminar, la Gomera te ofrece una red de senderos increíbles para que  puedas sacar tu “yo más natural”.

Para hacer senderismo no necesitamos ningún entrenamiento específico, aunque si es necesario realizar antes de iniciar la ruta  un pequeño calentamiento  (ejercicios de rotación de tobillos y rodillas, calentamiento en el resto de las piernas y también en la espalda). También es muy importante terminar la marcha con algunos estiramientos en los que se trabajen fundamentalmente todos los músculos del tren inferior y la espalda.

Debemos elegir una ruta apropiada a nuestra preparación y experiencia. Para ello, es necesario recabar información suficiente sobre la ruta: distancia, si se trata de una ruta circular o no (en caso de no serlo hay que considerar la manera de volver al punto de partida), el desnivel acumulado (tanto ascendiendo como descendiendo), la duración aproximada, un plano del recorrido  y el grado de dificultad. Todos estos datos nos serán de gran utilidad a la hora de analizar el recorrido antes de acometerlo y comprobar que es acorde a nuestra preparación.

Si esta es la primera que vas a  hacer senderismo, escoge una ruta relativamente fácil. Busca rutas cortas de una distancia razonable según tus habilidades. Si casi nunca sales a la naturaleza, te aconsejamos una ruta llana o un recorrido de 3 km.

Aquellas personas que deseen realizar rutas más largas y complejas (atravesando arroyos, pasando por zonas rocosas, caminando por senderos con gran altitud sobre el nivel del mar…) deben tener una buena condición física. Lo ideal es empezar por rutas de senderismo sencillas y, a medida que se vaya aumentando la capacidad, ir realizando caminatas con mayor exigencia.

Dentro del entrenamiento, también es importante aprender a andar ya que caminar por ciertos senderos no es fácil. Por ejemplo, cuando estemos en una ruta con desnivel ascendente, hay que colocar el cuerpo erguido y tener en cuenta que el peso recae sobre la pierna adelantada, por lo que es importante apoyar bien toda la planta del pie para que los gemelos no hagan un sobreesfuerzo. Por otro lado, en las bajadas, hay que poner especial atención en las rodillas, que deben estar ligeramente flexionadas; además, hay que buscar los lugares más horizontales posibles para apoyar toda la planta del pie y hacerlo a una velocidad adecuada para no correr el riesgo de caernos.

Para caminar con mayor seguridad te puedes servir de bastones. Es conveniente llevar uno o dos, puesto que, por un lado, ayudan a repartir mejor el peso tanto en las subidas como en las bajadas y, por lo tanto, evitar lesiones. Y, por otro lado, al utilizarlos, no sólo trabajas el tren inferior durante la caminata, sino que también haces esfuerzos con el tren superior, por lo que adquieres musculatura y quemas más calorías. Existen una gama de todos los precios en las tiendas especializadas.

Aunque caminar es saludable, es importante que las personas que sufran una enfermedad crónica o hayan sufrido un accidente cardiopulmonar recientemente consulten con su especialista antes de calzarse las botas de senderismo.

La Gomera, una isla con profundos barrancos, escarpadas y agrestes montañas, bosques milenarios, surcada por toda una red de senderos, te permitiré practicar el senderismo adaptado a tu condición física para ponerte en contacto con su naturaleza y un paisaje de una belleza salvaje.